La medicina convencional ya encuentra una relación perjudicial entre el cáncer de mama en las mujeres menopáusicas y el consumo de refrescos azucarados . Esto se ha publicado en la revista European Journal of Nutrition  y se trata de un estudio realizado (2018) por diferentes universidades españolas (Navarra, Madrid y Granada) y la de Harvard. La relación entre el consumo de productos azucarados y los diferentes tipos de cáncer ha sido bien establecida por otros grupos científicos. La propuesta de una dieta baja en carbohidratos (Low Carb) , paleolítica o encaso de riesgo por antecedentes personales y/ o familiares una cetogénica, supone una medida preventiva de gran utilidad.

No sólo como parte de una medicina preventiva sino también en el abordaje terapéutico del cáncer, desde la perspectiva metabólica, nos está abriendo una nueva forma de tratamiento, compatible con las convencionales, que nos permite atacar al tumor haciendo uso de sus características metabólicas diferentes (Efecto Warburg) a la de las células no proliferantes sanas. Para ello, y como base del tratamiento, la alimentación cetogénica supone un punto de partida excelente para favorecer la eficacia de todos los otros tratamientos.