Representa un elemento fundamental de cualquier terapia y en cualquier enfermedad. En definitiva, ¡lo más elemental para mantener la salud! Por ello la nutrición, a pesar del gran desprecio que por ella se siente, en las Facultades de Medicina, en donde sólo interesan los componentes de los alimentos, debiera ser fundamental en cualquier concepto de medicina. Yo sé, que la alimentación por sí sola, tiene muchas limitaciones, pero sin ella, el mejor de los tratamientos tendrá una eficacia más limitada.

Cuando hablamos de alimentos debemos considerar diferentes aspectos:

  • Qué comemos. Debemos procurar comer alimentos que se hayan producido teniendo un respeto por el entorno, es decir, que no hayan sido tratados químicamente y/o manipulados. Cuanto menos se haya intervenido en su preparación, mejor.
  • Comer siempre productos de la zona o de Este a Oeste, pero nunca de Norte a Sur. Esto se explica fácilmente con un ejemplo: ninguno tendría la ocurrencia de comer carne de foca en nuestra zona, no porque no la haya, sino porque las características de estas carnes están pensadas para otros climas. Los climas no cambian en Este – Oeste pero si en Norte – Sur.
  • Vegetarianismo o no: este es un tema complejo. Creo que para la salud una dieta vegetariana será siempre mejor pero, tampoco excluyo que se pueda comer algo de carne o pescado, mirando siempre la procedencia y como se han alimentado a dichos animales. En principio, rechazamos cualquier animal cuya alimentación sea a base de piensos.
  • ¡Coma para vivir y no viva para comer! Nuestra sociedad se hace obesa y esto es el suelo de donde parten muchas enfermedades. Los excesos de energía no aportan nada bueno.
  • Procure hacer las comidas mas fuertes en la mañana, por la noche, como dice el refrán, hay que comer como un mendigo. La calidad de nuestro sueño depende de esto.
  • Recuerde que la digestión consciente empieza con los ojos (prepare los platos agradables a la vista) sigue con el olfato (el uso de especias que favorecen el aroma y las digestiones) y continua con el gusto, para esto hay que masticar y llevar conciencia a la boca. El resto del proceso digestivo transcurre ya dentro de un proceso inconsciente. Sin tiempo todo esto es ¡pura entelequia!